Bizcocho de zanahoria y yogur

Ingredientes

- Huevos, 2 o 3 grandes
- Un yogur natural
- Azúcar, dos medidas de yogur
- Harina, tres medidas de yogur
- Aceite de oliva, una medida
- Zanahoria rallada, 215 gramos
- Zumo de naranja natural, una medida de yogur
- Levadura, un sobre

Preparación:

Empezamos con algunos pasos previos a la preparación del bizcocho en sí. El primero es pelar las zanahorias y rallarlas con la ayuda de un rallador o picarlas con una picadora. Otra cosa que haremos antes de nada será poner el horno a calentar a 180ºC, por arriba y por abajo. Y por último, prepara un molde en el que hornear el bizcocho, mejor si es de silicona, pero si no lo es, úntale mantequilla y espolvorea harina por sus paredes y base.
 Y vamos a meternos de lleno en la preparación de este bizcocho de yogur y zanahoria, que resulta especial por su sabor pero también por el uso de la zanahoria, una verdura que tiene muchos beneficios.

Coge un recipiente amplio y bate los huevos junto a la zanahoria rallada o picada, según la hayas preparado antes. Añade después el azúcar y bate con unas varillas en la batidora, y verás cómo aumenta el volumen de la mezcla, que además tomará un color entre amarillento y anaranjado. 

Luego vamos a agregar el yogur, el aceite de oliva y el zumo de naranja, y volvemos a mezclar con las varillas. Y después, tras tamizarlas, echaremos poco a poco la mezcla de harina y levadura, sin dejar de batir cada vez que añadas un poco de las mismas, ya que si las echas de golpe costará mucho más que se mezclen bien. Tienes que dejar la masa sin grumos y bien fina. 

Finalmente vamos a echar la zanahoria rallada o picada, removiendo después para distribuirla bien por la masa. Vertemos esa masa final en el molde y hornearemos durante unos 35 minutos más o menos. Hay que verificar que el interior no queda crudo antes de sacar del horno nuestro bizcocho, y también que no se nos quema por encima. Cuando estés seguro que ya está listo, lo sacas, dejas fuera unos minutos para que pierda temperatura, y luego desmoldas y pones sobre una rejilla para que enfríe bien por todos lados.